Mercadal (Menorca), 13 de septiembre 2022.- Cooperativas Agro-alimentàries Illes Balears quiere reconocer la labor de los gerentes de sus entidades socias. Comienza este recorrido realizando una entrevista a Tolo Pascual, gerente de la Cooperativa Agrícola Sant Martí situada en Es Mercadal (Menorca).
La Cooperativa Agrícola Sant Martí fundada en 1959 cumple 63 años de historia con 7,5 millones de euros de facturación que da servicio a sus más de 100 socios. La Cooperativa Sant Martí es especialista en ofrecer materias primas, piensos principalmente a los ganaderos del campo menorquín.
Tolo ha cumplido 49 de trabajo para la entidad, entró a trabajar en 1973 como ayudante del gerente de ese momento Joan Moll Mercadal. El próximo viernes, 16 de septiembre le llega su merecida jubilación.
Hoy hablamos con Tolo Pascual para que nos cuenta su trayectoria en “su primera casa” tal como dice él:
¿Qué recuerdas de tus inicios en la cooperativa?
– Lo que más recuerdo es la cantidad de explotaciones agrícolas en producción que había en aquellos tiempos (grandes, medianas y muchas de pequeñas). Cuando entré a trabajar en la Cooperativa Sant Martí en el año 1973 hacía unos tres años que la cooperativa había construido un nuevo local en el número 54 de la calle Doctor Llanso (Carretera Fornells).
Un local de 420 metros cuadrados con un piso encima para en un principio almacenara balas de paja y de hierba que tenían que recoger sus socios (nunca se puso en marcha esta función). Fue una gran instalación en aquellos tiempos con una fuerte inversión que se sufragó con aportaciones de los socios y con una ayuda del Instituto Nacional de Reforma y Desarrollo Agrario (IRYDA), un organismo público español, activo entre 1971 y 1995.
La alimentación del ganado en aquellos tiempos era muy diferente a la actual, no se realizaban analíticas a la leche y el ganado estaba mucho menos controlado sanitariamente. De los 420 metros cuadrados de la planta baja solamente se usaba una cuarta parte. Sobre el año 2000 el ayuntamiento decidió abrir un polígono industrial para trasladar desde el casco urbano todos los comercios que hicieran actividades molestas, como era el caso de la Cooperativa Agrícola de Sant Martí. Así, que con la venta del anterior almacén situado ya dentro del casco urbano y unas ayudas del Programa de Desarrollo Rural se construyeron dos naves de mil metros cuadrados cada una, una destinada a la distribución de sacos y productos varios y la otra para la fabricación de mezclas Uniffed y manipulación de graneles. Con el transcurso del tiempo también se adquirió un mezclador Uniffed, unas cintas transportadoras, unos silos metálicos, unos molinos para fabricar harinas y aplastado, una envasadora y toda la instalación para el manejo de los graneles y fabricación de mezclas, dando así un impulso cuantitativo y cualitativo a la actividad de la Cooperativa de Mercadal. Todo ello como no, con las ayudas europeas y autonómicas.
Has vivido dos traslados de la cooperativa. El de 1970 y el de 2003, ¿cómo ves el futuro de la cooperativa?
– El futuro de la Cooperativa está ligado al futuro del campo de Menorca, aunque a la vista de cómo va, hemos ido diversificando la actividad de la Cooperativa. A la actividad principal de suministros de piensos, materias primas, fertilizantes, productos veterinarios, y productos fitosanitarios, hemos abierto otras secciones como son la de suministros de productos de jardinería y de productos para riego. También se recogen excedentes de grano de nuestros socios para hacer su molienda y mezclado, así como comercializamos terneros para su sacrificio y posterior distribución. También comercializamos unas pequeñas producciones de productos que fabrican nuestros socios (queso, sobrasada, carne y tocino, fruta, etc.)
¿Qué te llevas bajo el brazo de estos años como gerente de la cooperativa?
– Lo que me llevo de la Cooperativa han sido casi cincuenta años en los que he disfrutado trabajando, haciendo lo que me gusta y en los que he conocido a muchísima gente. Hay que reconocer que es un sector que, aunque muy sacrificado, es muy sano, la gente es buena gente y si te puede ayudar lo hace desinteresadamente.
¿Cuáles son los mayores retos a los que te has enfrentado en la cooperativa?
– Los mayores retos que he tenido con la Cooperativa, como casi siempre, son los inicios, donde la falta de tesorería te supedita todo lo que deberías o podrías hacer. Durante estos años hemos dado una estabilidad a esta tesorería y esto redunda en una mayor competitividad en los precios que podemos ofrecer a nuestros socios. Otros retos fueron cuando se construyeron las dos naves con todo lo que ello conlleva.
¿Qué les deseas a tus compañeros de la cooperativa, ¿les podrías dar tres consejos?
– Yo creo que los tres consejos que podría darles se resumen en uno solo. Que miren a la cooperativa como algo suyo (aunque sepan que no hay nada suyo) como me lo he mirado yo durante todos estos años. Es la manera que funcione bien.
Podrías describirte, en una palabra.
– Yo creo que es la gente con la que he tratado la que tiene que describirme. Yo en el transcurso de estos años he intentado ser una persona seria, tratable y que si alguien necesitaba algo y yo podía dárselo se lo daba.
¿Qué es lo que más te relaja?
– A esta pregunta os la responderé dentro de unos meses, cuando sepa cómo me va la jubilación.

El próximo viernes toma el relevo Gloria Riudavets Triay como nueva gerente de la Cooperativa Sant Martí.